La sesión plenaria ordinaria del mes de julio sirvió para aprobar las cuentas generales de 2009. La oposición municipal pasó revista al gasto del presupuesto del año pasado, unos 16 millones de euros, por parte del equipo de gobierno municipal de Izquierda Unida.
PSOE y PP coincidieron en señalar que “la aprobación llega marcada, una vez más, por la tardía aprobación del presupuesto de este año”. Además, señalaron “el incremento de los impuestos que en el caso del IBI ha permitido recaudar unos 300.000 euros más, dinero que ha salido del bolsillo de los tosirianos”.
Para el portavoz socialista, Juan Eugenio Ortega, “se han quedado sin ejecutar numerosas inversiones previstas, por falta de ganas o de criterio político. A todo esto hay que sumar los 39 reparos de intervención, 7 de ellos en contra de ley, por falta de previsión a la hora de confeccionar los presupuestos. Por poner sólo un ejemplo, el equipo de gobierno no había tenido en cuenta que en la guardería había que prever la colocación de cristales”.
Desde las filas del PP se señaló el “gasto en horas extraordinarias que ha alcanzado una cifra desorbitada: 227.000 euros, la mitad en servicios de la Policía Local”. Además, se criticó “lel creciente endeudamiento y el tiempo que se tarda en pagar a los proveedores”.
Por su parte, la portavoz de Izquierda Unida, María Dolores González, aseguró que “el dinero del IBI se había gastado en la mejora del nivel de vida de los tosirianos. Es cierto que no estamos contentos con algunos gastos, como las horas extraordinarias, pero no lo es menos el hecho de que hay numerosos actos que requieren la presencia de la Policía Local. Y eso conlleva un coste en horas extraordinarias. De todas formas, la cifra de gastos sin consignación, 2.600.000 euros, pese a no ser un dato positivo, hay que subrayar que se ha reducido considerablemente en más de 400.000 euros”.
Además, el pleno sirvió para dar aplicación al remanente del año pasado, cifrado en algo más de un millón de euros. De esta cantidad se han destinado 130.000 euros para nuevos proyectos como alquitranado de calles, arreglo de caminos rurales o la remodelación del parque de las Celadas.
La mayor parte del remanente servirá para rebajar la deuda del consistorio. De esta forma, 330.000 euros irán dirigidos a saldar gastos de ejercicios anteriores (desde 2004) que estaban reconocidos pero pendientes de pago. Y 470.000 euros irán destinados a gastos sin reconocer que era necesario pagar. “Con esto hemos abierto la puerta a los numerosos proveedores que no podían cobrar sus deudas”, afirma González.
Por último se han apartado 150.000 euros para 2011, “por lo que pueda pasar, ya que en esa fecha no podremos pedir créditos”.
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